Cali, agosto
6 de 2013
En las últimas décadas en los países de América Latina y el
Caribe los medios de vida se constituyen en el capital socioeconómico de mayor
impactado por la ocurrencia de desastres medianos y pequeños que configuran el
riesgo extensivo, principalmente asociados a la manifestación de fenómenos
hidrometereológicos potencialmente peligrosos (inundaciones, tormentas
tropicales, deslizamientos, avenidas torrenciales, etc.) que tienen mayor
recurrencia y cobertura, en relación con los fenómenos geológicos (sismos,
tsunami, erupciones volcánicas).
Las pérdidas económicas asociadas al pasado Fenómenode la
Niña en combinación con la segunda temporada de lluvias del 2010 – 2011 en
Colombia, constituyó una señal de alerta para el Gobierno Nacional, que redundó
en el mejoramiento de sus procesos para gestionar anticipadamente los riesgos y
así disminuir los potenciales costos que esto implicaría a futuro. Teniendo en
cuenta el contexto anterior, la iniciativa del Gobierno Colombiano para
recuperar los medios de vida de las familias afectadas por la condiciones hidrometereológicas y la
vulnerabilidad acumulada, se constituye en un paso fundamental para construir
familias y territorios más resilientes.
Se evidencia un claro interés del Estado Colombiano en
avanzar e ir más allá de la entrega de Asistencia Humanitaria de Emergencia, a procesos
de intervención social para la recuperación de las comunidades damnificadas por
estos eventos y potencializar así acciones con perspectiva de desarrollo.
Este impulso nacional se convierte en una buena práctica de recuperación,
con miras al fortalecimiento, comunitario e institucional y el aprovechamiento
de los recursos endógenos para avanzar hacia la conformación de territorios más
resilientes ante desastres de origen hidrometereológicos. Lo anterior se hace
evidente en acciones trascendentales como la ejecución del proyecto “Apoyo
a las familias damnificadas en 11 municipios del Valle del Cauca y el Municipio
de Puerto Legüizamo en Putumayo afectadas por el Fenómeno de la Niña 2010 –
2011”, financiado por el
Gobierno Nacional a través de Colombia Humanitaria en convenio con Corporiesgos
y en alianza con la Fundación Paz y
Bien, la Corporación OSSO y la Universidad Javeriana de la ciudad de Cali.
El lanzamiento de este proyecto se realizó en la Ciudad de
Obando, Valle del Cauca contando con la participación del Gerente de Colombia
Humanitaria el Dr. Roberto Zapata, como anfitriona la alcaldesa de Obando la
Dra. Nydia Lucero Ospina López, por
Corporiesgos la Dra. Patricia Zúñiga Directora Ejecutiva y la coordinadora del
proyecto Dra. María Esther Díaz Ceballos, así como cincuenta gestores de medios de vida y como principales protagonistas del proyecto, cien representantes de las mil
familias beneficiadas, organizaciones comunitarias e institucionales
(Corporación OSSO, Universidad Javeriana y Fundación Paz y Bien), como medios
de comunicación nacional, local y nacional.
El acompañamiento internacional del proceso se realizó por
parte de la Estrategia Internacional de
Reducción de Desastres – EIRD/ONU en cabeza del
Ingeniero Henry A. Peralta
promotor por Colombia de la Campaña Mundial Ciudades Resilientes: mi ciudad se está preparando. La
colaboración del Ing. Peralta en el proceso ha contribuido a dinamizar la participación de estos 12
municipios en conjunto con Corporiesgos, embajador de buena voluntad de la
EIRD/ONU, en la promoción y aplicación del Marco de Acción de Hyogo 2010 -2015,
aumento de la resiliencia de las naciones y comunidades ante desastres.
En la Foto de derecha a izquierda, el Gerente de Colombia
Humanitaria Dr. Roberto Zapata, la alcaldesa de Obando, Dra. Nydia Lucero
Ospina López, Dra. Patricia Zúñiga
Directora Ejecutiva de Corporiesgos y el Ing. Henry A. Peralta Promotor para
Colombia de la Campaña Ciudades Resilientes de UNISDR.
Para mayor información sobre este tema, recomendamos visitar los siguientes links.
http://www.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario